El maridaje del pollo depende de muchos factores, ya que esta carne de ave ofrece diversas opciones y resultados según se cocine. Entre estos elementos a considerar no solo se encuentra el tipo de cocción, sino que la salsa o guarnición jugará un papel fundamental antes de elegir el vino adecuado.
Recuerda que casar correctamente el pollo y el vino es lo que te permitirá apreciar los sabores de cada uno de los ingredientes, sin que sean opacados.
La guarnición en el maridaje del pollo
Es normal escuchar que la guarnición es la que marcará el estilo del vino cuando se trata del maridaje del pollo. Por ejemplo, cuando esta es simple, resulta mejor elegir un tinto que sea ligero como por ejemplo nuestro vino joven "Señorío de La Eralta"
Por otra parte, para guarniciones más fuertes, cuyos sabores estén más marcados o que tengan una personalidad más definida, un vino de mayor estructura o complejo es más acertado como por ejemplo nuestro Reserva "Señorío de La Eralta" Esto aplica para salsas de trufas, rellenos con pasa o similares, así como para las setas.
Sin embargo, el vino blanco también resulta una buena elección, puesto que ayuda a potenciar los sabores de las carnes, sin dominarlas por completo.
Maridaje de las pechugas de pollo
Cuando se trata de pechugas de pollo cocidas a la plancha, un vino blanco que no tenga demasiada acidez como por ejemplo nuestro blanco "Señorío de La Eralta" es lo recomendado. Aunque, un Chardonnay también podría figurar como un buen compañero.
De igual manera, con las ensaladas con pollo ocurre algo similar, por lo que pueden marinarse de la misma forma; con vinos blancos poco ácidos.
Pollo guisado y vino
El maridaje del pollo, tanto guisado, como con salsas, se aconseja con vinos blancos medios o ligeros. No obstante, casarlos con tintos jóvenes, pero de variedades más potentes también puede funcionar. Podría ser un Monastrell, un Tempranillo como nuestro joven "Señorío de La Eralta" o un Merlot si se busca una opción foránea.
Este último, además, es de los más adecuados para salsas donde el tomate es protagonista junto al pollo. Pero, sin dudas, lo importante es que el maridaje no debe, bajo ninguna circunstancia, enmascarar a la carne, sino complementarla.
¿Qué hacer si la receta del pollo es picante?
Para un pollo al curry o a la pimienta lo más adecuado es escoger un tinto tempranillo con larga crianza en barrica para atenuar el sabor del picante como por ejemplo nuestro Gran Reseva "Señorío de La Eralta"
Cuando el pollo es asado
Esta es una de las formas y recetas más recurrentes y sencillas de preparar, siendo considerado como sano y mediterráneo. Y es que, el pollo asado no necesita mayor aderezo que hierbas y limón para que el resultado sea exquisito.
Y es debido a esta presentación, que el maridaje del pollo asado va perfectamente con vinos blancos secos y de acidez baja.
En este sentido, al aderezar la carne con tomillo y limón, un Chardonnay no muy fermentado en barrica y joven iría de maravilla, ofreciendo una acidez adecuada y la frescura necesaria.